Embárcate en un viaje divino como el ángel de Dios en el día del juicio: el cielo o el infierno, un cautivador juego de simulador de vida después de la vida. Su misión: juzgar las almas de innumerables individuos y determinar su destino eterno. ¿Ascenderán a la escalera al cielo, o descenderán a las profundidades ardientes del infierno?
Esto no es solo un juicio simple; Es un juego de detectives atractivo donde interrogarás a las almas usando un detector de mentiras, forzando confesiones y descubriendo la verdad detrás de sus actos terrenales. Desde figuras históricas famosas (comandantes, emperadores, reinas, reyes, celebridades y más, hasta personas comunes como médicos, maestros e incluso estafadores callejeros, cada alma enfrenta su juicio.
¿Serás misericordioso o justo? ¿Justo o implacable? La elección es tuya. Este simulador de otra vida te desafía a discernir el bien del mal, Angel de Demon. Descubra las razones detrás de sus acciones y entregue justicia.
Características del juego:
- Juicio Divino: Envíe almas al cielo o al infierno con un simple golpe.
- Interrogación del detector de mentiras: Descubra verdades ocultas con el poder del detector de mentiras.
- Colección de confesión: Fuerza Confesiones y recolecte evidencia para solidificar su juicio.
- Segundas oportunidades: Ofrezca una oportunidad final de redención.
- Skins de ángel desbloqueables: Personaliza tu apariencia divina.
- Minijuegos atractivos: Disfrute de diversos juegos más allá del juicio.
- Niveles desafiantes: Pon sus habilidades de juicio con escenarios únicos.
- Personajes famosos: Juez figuras históricas y personajes ficticios.
- Matriota del alma: Mégase de almas con sus cuerpos correspondientes.
- Detective definitivo: Conviértase en el Detective Master de la vida futura.
Día del juicio: el cielo o el infierno combina sin problemas la emoción de los juegos de jueces, los juegos de Dios, los simuladores de la vida después de la vida y los juegos de detectives en una experiencia inolvidable. ¡Descargue ahora y experimente la mejor prueba de justicia!